Pensamientos

Cuando una propuesta se pone en marcha hay una gama de posibilidades que se irán dando a medida que camine. Podrá ser buena, mala, mediocre, insulsa, etc, etc.
Lo que a esta altura me llama la atención es lo que despierta en cada uno que la observa; desde la indiferencia (que es su mayoría), la adhesión y la critica. Me resulta difícil diferenciar la crítica hecha desde un “pensamiento crítico” a la crítica del “pensamiento criticón”.
El rechazo de los que enviaron el pedido de no enviar más la promoción del blogs(en todo su derecho). Las criticas a la falta de ortografía (acertadas por cierto) .El cuestionamiento a la utilización de algunas listas de mail para difundir el espacio en estos tiempos en donde las cadenas de mail circulan por doquier e internet nos plantea todo el tiempo reformular el concepto de propiedad.
A veces me parece que en numerosas ocasiones nos detenemos en observar el cómo sin llegar nunca a el qué y mucho menos al para qué.
En relación a esto el sábado 23 de marzo en la revista Ñ aparece un artículo sobre un debate entre Liliana Heker y Cortazar sobre el exilio (entre los fundamento de los que se fueron y los que se quedaron durante la dictadura).

Creí siempre en la polémica como género; tal como escribí en ese tiempo; son lo contrario a las guerras: nadie muere ni mata en ellas, ni siquiera se puede afirmar que alguien las gane o las pierda.
En última instancia, será un tercero (el lector) quién de dos sistemas de ideas sacará sus propias conclusiones”.

Me pareció una manera de expresar una de las intenciones de este espacio que no va en contra de nadie, tampoco en defensa de ninguna verdad, solo busca hacer circular la pregunta, que moviliza y ayuda a crecer; pero con la convicción de que las preguntas primeras debemos hacérnosla a nosotros mismos ya que de otra manera no trascenderemos al "pensamiento criticón".

Ricardo Hernández.